La primera
infancia es el período en el cual aprenden y se desarrollan más rápidamente,
por lo que resulta necesario que los niños sean cuidados con mucho afecto,
cuidados, atención y con una adecuada estimulación.

Todos los niños tienen la necesidad de conocer el mundo en que vive,
entonces mediante el juego logra utilizar sus sentidos para reconocer su
mundo. Siente, mira, toca, huele, experimenta, fantasea, y crea. Ustedes
como padres de familia deben de facilitarles
las herramientas necesarias para lograr esta exploración y adaptación al
entorno.
El valor
del juego en lo que respecta a la estimulación de la imaginación y
capacidad de aprendizaje del niño, ya que otorga en ellos un espacio para
que puedan ser libres de expresar su creatividad y demostrar su curiosidad. Es
un re-conocimiento de las cosas, que posibilita el buen crecimiento del mundo
interno, intelectual y emocional del niño.
El juego
en la primera infancia, y en los niños que aún no han adquirido el lenguaje es
un espejo de su mundo interior, y permite:
Divertirse.
* Conocerse a sí mismo.
* Conocer y explorar el mundo.
* Expresar sentimientos.
* Proyectar fantasías.
* Elaborar conflictos.
* Aprender a compartir.
* Socializar.
* Investigar.